La Semana Santa es una tradición importante y una experiencia cultural maravillosa en toda Mallorca. Las familias mallorquinas se reúnen para preparar los tradicionales platos de Pascua: rubiols, empanadas y crespells. Las procesiones desfilan por Palma todas las tardes. Además de las festividades religiosas, La Fira del Ram es una feria anual de diversión que tiene lugar en Palma durante la Semana Santa. Es una gran oportunidad para soltarse y divertirse con la familia y los amigos.
La isla se llena de fiesta durante la Semana Santa. Los rituales tradicionales y el ambiente festivo hacen que sea un momento emocionante para visitar la isla. Es una buena oportunidad para sumergirse en la cultura y las tradiciones locales.
La Semana Santa comienza con el Domingo de Ramos
La Semana Santa está repleta de rituales tradicionales, procesiones y actos religiosos que tienen lugar durante la semana previa al Domingo de Resurrección, para conmemorar la Pasión de Cristo. El Domingo de Ramos es uno de los días más importantes del calendario cristiano después de Navidad y Pascua. Para muchas iglesias, el Domingo de Ramos, o “Domingo de la Pasión”, marca el comienzo de la Semana Santa.
La Biblia revela que cuando Jesús entró en Jerusalén, la multitud le saludó agitando ramas de palma y cubriendo su camino con los ramos. En Palma, el Domingo de Ramos se celebra tradicionalmente con la bendición de ramas de palma y una procesión en muchas iglesias. La misa de la Pasión en la Catedral de Palma va seguida de una procesión de sacerdotes y fieles por las calles y va precedida de la bendición con agua bendita por parte del obispo de Palma de las ramas de palma y los olivos traídos por numerosos espectadores. Es un día para celebrar la entrada triunfal de Jesucristo en Jerusalén, la semana anterior a su muerte y resurrección. Por ello es costumbre llevar a casa las ramas de palma bendecidas para adornar las puertas de entrada como elemento de protección para la familia.
Procesiones de La Semana Santa
La Semana Santa / Pascua se remonta al siglo XVI, cuando la Iglesia decidió presentar la historia del sufrimiento de Cristo de una forma que la gente pudiera entenderla. Se decidió que la mejor manera de hacerlo sería con una serie de procesiones por las calles que representasen escenas de la historia del nacimiento y muerte de Jesús.
Es toda una experiencia seguir las gloriosas procesiones de Semana Santa aquí en Mallorca, cuyo contenido varía según el día. En las procesiones participan miembros de hermandades religiosas o cofradías, que visten capirotes y túnicas como símbolo de penitencia y anonimato. Las procesiones suelen ser solemnes y reflexivas, ya que conmemoran la Pasión de Cristo. Una de las procesiones más vivas de la Semana Santa es la Procesión del Silencio, que se celebra en completo silencio, sólo roto por un profundo y palpitante redoble de tambor, y que suele celebrarse el Martes anterior a
la Semana Santa.
El Jueves Santo es otro día importante en el calendario de la Semana Santa, miles de personas llenan las calles para ver la Procesión de la Sangre, la mayor de las procesiones de Semana Santa, con cientos de penitentes encapuchados y varias hermandades o cofradías, cada una con sus propias túnicas penitenciales y capirotes cónicos distintivos. Todos participan y llevan a Cristo crucificado por las calles para recordar a los creyentes el significado del cristianismo. Estas cofradías recorren lenta y penosamente las calles de la ciudad portando las pesadas estatuas religiosas mientras una música solemne les acompaña en su lento avance. La procesión puede durar horas y a menudo se prolonga hasta bien entrada la noche.
Domingo del Ángel: El domingo después de Pascua es cuando, tradicionalmente, se repartía pan entre los pobres. Hoy en día se sigue distribuyendo comida, pero las familias y los amigos se reúnen para compartir una comida al aire libre. Estos acontecimientos constituyen una parte importante del patrimonio cultural y religioso de Palma de Mallorca y son una experiencia significativa tanto para los lugareños como para los visitantes. La isla se llena de fiestas durante la Semana Santa. Es una buena oportunidad para sumergirse en la cultura y las tradiciones locales.
La comida es el centro de la Semana Santa en Mallorca
Las regiones de España celebran la Semana Santa preparando una gran variedad de platos vinculados a las costumbres del calendario cristiano. La Semana Santa en Mallorca significa poder disfrutar de algunas comidas tradicionales en toda la isla. Es típico que las familias mallorquinas se reúnan en Semana Santa y cocinen juntas. Hay una serie de platos dulces y salados que juegan un papel importante, y durante las vacaciones de Pascua habrá un montón de Panades, Cocarrois, Crespells y Robiols. A pesar de estar hechos de la misma pasta básica, difieren mucho en sabor.
Panades: son pequeñas empanadillas redondas que tradicionalmente se rellenan de carne, sepia, pescado, pollo y guisantes. Las Panades de Pascua están rellenas de carne de cordero, cebolla y guisantes.
Cocarrois: tienen forma de empanada de Cornualles, pero están rellenas de acelgas, cebollas dulces, ajo y pasas.
Crespells: son galletas dulces de diferentes formas hechas especialmente para Pascua. Se preparan mejor con ingredientes mallorquines, como aceite de oliva, manteca de cerdo y naranjas de Sóller.
Robiols: son pastas dulces con forma de media luna. Se rellenan con mermelada de albaricoque, chocolate, nata o un relleno azucarado de membrillo conocido como “cabell d’àngel”.
Mallorca no se diferencia del resto del mundo a la hora de consumir grandes cantidades de chocolate en Semana Santa, ya que otra de las grandes tradiciones son las figuras y esculturas de chocolate llamadas “mones de pasqua”. Pueden tener forma de conejo, huevo, personaje de dibujos animados, etc. Muchas pastelerías compiten por exhibir en sus escaparates las esculturas de chocolate más espectaculares. Pueden ser un edificio, un personaje popular o la representación de cualquier cosa.
Otro de los platos típicos de Semana Santa es el frito mallorquín, un plato elaborado con despojos de cerdo, patatas, pimientos y cebollas. En Semana Santa se prepara con cordero, frito de cordero. Se combina con una serie de hierbas maravillosas, la principal de las cuales es el eneldo, que según se dice es una hierba autóctona de Mallorca. Los tradicionales festines de cordero asado son muy populares el Domingo de Pascua y es habitual que se celebren “ferias gastronómicas”. Aquí los residentes se reúnen para bailar, socializar y disfrutar de la comida que han preparado en sus casas. Para muchos lugareños, la Semana Santa no sería lo mismo sin estos sabores. Así que, si está en Mallorca esta Semana Santa, no deje de disfrutar de un tour culinario por Mallorca a través de su cocina de Pascua.
Massar Midgley Mahdi
Team Assistant @ Mallorcaresidencia